29 de mayo 2003

Siento la tinta volver
a mis dedos,
respiro la felicidad
cada vez que levanto
la mirada en la noche,
la misma noche
que alguna vez
me vio llorar,
hoy rie conmigo.

El sonido a metal del tiempo
se torna dulce
y los tragos amargos
tienen un olor cautivante

Vuelvo a marearme
en la bocanada de humo
del mismo cigarrillo inmaduro
que dejé de sentir con ella,
ella que hizo mi vida
rotar en mil estaciones
como quien dice:
ladrón que roba a ladrón, mejor se esconde,
para seguir robando otros 100 años.

y esos 100 años, no son
ni de perdón ni de soledad,
por que vuelvo a la tinta
como el pez al agua,
como el enamorado a ti
como el que pierde y encuentra consuelo.

y los amigos del tiempo
me convencieron
de volver al mundo
mi vida corre con los perros salvajes
y cabalgo en el viento frío
con un calor entumecido,
y da lo mismo la canción
por que canto ahora
el canto perenne
y me envuelvo
en el amor a la vida

y desde fuera, desde la mampara exterior
queda la envidia mirando con desolación,
mientras trato de hacer el pasar del supremo
lo más torrencial posible
y el dia a dia
como caudaloso el río
esparce en su riego
palabras que traen vida.

caigo con la mirada en ti y
vuelvo a ser otro, ese otro que siempre fui
y quiero más lo que quiero
y amo mas que lo que odio

hoy volví a nacer y di corte
esa torpe resurrección diaria

mi reencarnación en vida
y llego a ser pleno aunque sin ti.